El legado de la innovación

Cuando nuestro fundador, Jim Waters, cumple noventa y cinco años este mes, echamos la vista atrás a un legado de liberación del potencial de la ciencia que comenzó a construir en 1958. Waters ha estado a la vanguardia de la innovación científica desde que Jim Waters perfeccionó el primer analizador de gases por infrarrojos en 1958. Lo que comenzó en las oficinas del sótano de una comisaría de policía en Framingham, MA -a sólo 12 millas de la actual sede corporativa de Waters- ha evolucionado hasta convertirse en una corporación global de 2.300 millones de dólares que mejora la salud y el bienestar humanos.

Jim fundó lo que entonces se llamaba Waters Associates con sólo cinco empleados. Durante esos años de formación, Waters Associates era lo que ahora llamaríamos una boutique de investigación con la que las empresas se ponían en contacto para construir instrumentos únicos para diversos fines. Entre los primeros productos figuraban un fotómetro de llama para agua de alimentación de calderas, un hidrómetro de globo, un detector de gases nerviosos y refractómetros de control de procesos.

En 1965, la técnica de la cromatografía líquida era una mera curiosidad. La mayoría de los químicos que dominaban la CL trabajaban en laboratorios de investigación universitarios e industriales. Ese año, Waters Associates se embarcó en su primer proyecto de sistema de CL. En un documento interno, Jim escribió entonces: "Creemos que la LC puede convertirse en un mercado de masas, que se expandirá mucho más allá del laboratorio de investigación hacia el control de calidad de la producción, y las pruebas clínicas."

La apuesta de Jim por la LC tardó un poco más en dar sus frutos, pero en 1972 el Dr. Helmut Hamberger, jefe de posgrado del Dr. Robert Woodward, ganador del Nobel, de la Universidad de Harvard, buscó la ayuda de Jim. Ambos desarrollaron una separación en dos días para sintetizar la proteína B12.

Ese fue sólo el comienzo de la innovación para mejorar la salud y el bienestar humanos. A medida que Waters crecía, innovaciones como la cromatografía líquida de ultra rendimiento, conocida como UPLC®, que Waters introdujo en el mercado en 2004, no sólo permiten una separación más avanzada de las muestras, sino que utilizan un 35% menos de energía y hasta un 80% menos de disolvente, lo que las hace extremadamente respetuosas con el medio ambiente. El primer sistema ACQUITY UPLC abrió la puerta a un torrente de innovación que sigue dando forma a la ciencia de la separación en la actualidad. Lo que comenzó como un único sistema UPLC en 2004 se ha ampliado hasta convertirse en una familia de productos adecuados.

Hoy en día, los productos innovadores de Waters, como nuestro sistema BioAccord, el mejor de su clase, para el análisis biofarmacéutico, están ayudando a desarrollar vacunas que salvan vidas. El espíritu de innovación que Jim inculcó en Waters desde el principio está incluso en el núcleo de Immerse, un laboratorio de innovación e investigación de Waters en el corazón de Cambridge, MA, que abrió sus puertas en septiembre. Immerse es un laboratorio de colaboración construido para acelerar la próxima generación de avances científicos.

Durante más de seis décadas, Waters ha liberado el potencial de la ciencia proporcionando beneficios a los clientes, empleados, accionistas y a la sociedad a través de la tecnología de medición analítica, la profunda experiencia científica y los conocimientos fiables para mejorar la salud y el bienestar humanos. Nuestros científicos y expertos de todo el mundo hacen avanzar la innovación cada día para afrontar los retos del mañana.